La mayoría de los niños tiene pocas oportunidades de conocer la verdadera oscuridad , ya que en los pueblos y ciudades no hay forma de huir del sempiterno color anaranjado de las luces urbans. La oscuridad es considerada algo que esconde peligros desconocidos y que, por tanto debe evitarse. NO obstante, una excursión nocturna al campo bien supervisada puede ser una experiencia cautivadora y , una vez que los ojos de los niños se hayan adaptado a la oscuridad, la emoción empezará a sustituir su miedo.
En una noche de luna llena, pasead por un camino conocido. Os parecerá muy distinto, pues vuestros ojos os servirán de mucho. Oiréis ruidos y sentiréis olores que habitualmente no percibis. De noche se oyen toda clase de animales, mucho mejor que en pleno día : lechuzasy búhos, seguro que también cigarras , pequeños roedores... El cielo está lleno de estrellas, ¡pero también las hay en el suelo! Son las luciérnagas , que emiten una luz verdosa . Atrapa varias y tendrás en tu mano una linterna viva.
¡ No lo dudeis la noche os revelará un sin fin de secretos!.
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